Sin duda alguna la producción audiovisual
es una actividad que requiere profundidad analítica del contexto histórico y de los
personajes que construirán la historia, un amplio conocimiento de su propio lenguaje, cultura general,
saber y técnica para el uso de herramientas y software especializados; pero
principalmente una idea que se muestre de forma auténtica y original para que
llegue a ser considerada una pieza de arte, una obra que trascienda. El objetivo es que el receptor procese de
manera global la información para obtener como resultado una experiencia multi-sensorial
unificada.
La evolución tecnológica ha hecho que muchos productores y diseñadores hagan maravillas con los efectos visuales y sobre todo en la post-producción, sin embargo se requiere desarrollar la creatividad para que la idea principal, la propuesta, sea original; si bien es cierto que ya no se inventa el hilo negro de ningún tema, si se puede presentar desde una perspectiva novedosa.
Para crear un producto innovador es necesario estudiar a fondo la idea, su origen, evolución y culminación del mismo para que basado en un hecho documentado, la historia genere credibilidad y la base pueda llegar a ser mutada y complicada hasta donde desee el productor.
Dos elementos indispensables para la producción audiovisual son el juego de la luz y la banda sonora, ya que producen la tensión mental y emocional necesaria para captar la atención y transmitir un mensaje. Sin el adecuado manejo de dichos elementos, las reacciones que produce la iconicidad no generarían los efectos sensoriales que se busca imprimir en el receptor.
La producción audiovisual genera adicción y consumo irreflexivo para un tipo de público que únicamente busca distracción, pero también invita a la crítica del receptor educado en el lenguaje audiovisual. Umberto Eco[1] manifiesta: "La civilización democrática sólo se salvará si se hace del lenguaje de la imagen una provocación a la reflexión crítica y no una invitación a la hipnosis".
Thought of you
Me gustó la producción de dicho
video ya que el productor buscó transmitir un cliché amoroso sin expresiones
faciales, acto complejo debido a que el ser humano tiende a manifestarse
mediante gesticulaciones. Estudió a fondo y con detalle un elemento artístico
en el que las emociones son siempre visibles, la danza. La historia es emotiva y conjunto su trabajo, logró generar empatía con el receptor, que se identifique con
los personajes y con alguna experiencia similar.
[1] Crítico
literario, semiólogo y novelista italiano. Doctor en Filosofía en la
Universidad de Turín.